Con la vista al frente
Racing perdió 2-1 con River luego de un invicto de diez fechas en el Torneo de la LPF. Así cerró el campeonato y ahora se enfoca en los octavos de final de la Copa Libertadores, con la serie frente a Atlético Nacional en el horizonte inmediato.
Racing también puede definirse por oposición. El estilo asumido en los últimos años se ha impregnado de tal manera que, cuando se topa con un obstáculo mayor para desarrollarlo, la incomodidad resulta notoria. Esta vez le tocó padecer, en especial en la primera media hora: el River campeón le sacó la pelota, la controló por completo, sostuvo el juego en campo ajeno sin otorgar chances de réplica y martilló de manera permanente sobre el arco de Tagliamonte, reemplazante de Arias (tuvo una molestia muscular en el calentamiento previo).
River achicó hacia adelante, duplicó presencia en las pelotas divididas, ganó la mayoría de los duelos individuales en el medio y, desde allí, lanzó los ataques con pelotazos directos, rectos o cruzados, hacia la banda derecha. Esta vez la línea de cinco no funcionó porque el espacio atrás de Rojas se hicieron amplios para las coberturas de Quiroz o Piovi ante las penetraciones de Solari.
El 1-0 se presumía y llegó a los 22 minutos con un anticipo de Beltrán en el área chica luego de un centro de Solari. La diferencia pudo haber sido mayor en los cinco minutos posteriores, pero Tagliamonte se impuso cara a cara ante Solari y Barco, a la vez que un remate del volante dio en un poste. Cuando Racing conectó, recuperó identidad y juego. En la única ocasión en la que pudo juntar pase, un zurdazo de Oroz pedía gol abajo, junto al poste izquierdo, aunque un manotazo de Armani lo impidió.
Si bien el local aumentó la diferencia a los 26 minutos de la segunda parte con un cabezazo de Paulo Díaz, en ese capítulo rigió la paridad porque Racing dividió el balón, logró alejar a River de zona de definición y estableció una relativa paridad a pesar de haber contado con un hombre menos por la expulsión de Piovi en el final del primer período (falta como último hombre). River dejó de acercarse a Tagliamonete, que apenas intervino una vez en una acción de riesgo. En el último instante, Racing también acumuló llegadas con un cabezazo de Sigali tapado de manera notable por Armani y por el golazo de tiro libre a cargo de Jonatan Gómez.
Terminó el Torneo de LPF y se cortó un invicto de diez fechas. Ahora queda sostener la esperanza en que todo será mejor, con la serie de octavos de final de la Copa Libertadores ante Atlético Nacional a punto de empezar.
